Entrevista a James Petras

Mario Hernández, Rebelià³n

MH: Recientemente publicaste un artà­culo muy crà­tico sobre los primeros pasos dados por Lula en Brasil

…—JP: Primero, creo que es importante hablar con los hechos y no con impresiones. Segundo, entender que los partidos tienen trayectorias y no quedarse con las fotos fijas, sino ver una pelà­cula donde se pueden notar cambios significativos desde los orà­genes hasta hoy.

El PT no es el partido de 1980. ¿De quà© forma ha cambiado? En el 80 era un partido à­ntimamente vinculado con los movimientos sociales, a los barrios, las favelas, a los Sin Tierra, mucha efervescencia, debates marxistas, teà³logos de la liberacià³n, muchos voluntarios, ningún profesional, trabajaban en los barrios, tenà­an un programa socialista, con fuerte contenido marxista, tenà­an bases de los movimientos, asambleas populares para discutir, evaluar los candidatos, rechazarlos, criticarlos. No tenà­an máquina electoral, eso es lo que cambià³. ¿Quà© es el PT ahora? En el último Congreso el 75% de los delegados eran abogados, profesionales, funcionarios, empresarios, etc. No tenà­an nada de popular. Además, me comentà³ Perry Anderson en Caracas, que Lula recibià³ más dinero para financiar su campaña el candidato oficial. Recibià³ mil millones de reales para publicidad en televisià³n ¿De dà³nde venà­a el dinero? Venà­a del gran capital. Entonces, más allá de la composicià³n, de la orientacià³n, tiene deudas con el gran capital. No es simplemente la estructura de poder, los cambios organizativos, los giros. Son acuerdos concretos con sectores que le dieron ciento de miles de reales para montar la campaña publicitaria. ¿Por quà©? Porque pactà³ con el FMI un ajuste brutal, aumentà³ el porcentaje del PBI para cumplir con la deuda, bajando el presupuesto social un 30% en educacià³n, salud, etc. Peor que Cardoso.

Despuà©s elige con su dedo -ya no es un partido de asambleas- al vicepresidente, un gran capitalista textil, un explotador de sus trabajadores; empieza a pactar con los partidos burgueses, en cada Estado, a veces contra sus propios partidarios. No quiere apoyar el referà©ndum contra el ALCA a pesar que 11 millones votaron en contra. Cuando llega al poder empieza a cumplir porque los que pagan la cuenta quieren cobrar. Empezà³ con un ajuste estructural, luego la flexibilizacià³n del trabajo, habla de igualdad de las jubilaciones, bajando las del sector público, con demagogia, citando algunas excepciones, algún juez que cobra U$S 10.000, algún fulano U$S 6.000, pero la gran mayorà­a no supera los 2.000, quiere bajarlas a 1.000 para ser equitativo con el sector privado, es la igualdad de empobrecer. Habla de Plan Hambre 0 pidiendo colaboracià³n a los capitalistas para financiarlo. La peor caridad. La gente no quiere bolsas de comida, quiere empleo. Fue a Davos a pedir colaboracià³n a los grandes capitalistas, a Soros y los otros, para la lucha contra la pobreza. A los mismos que la generaron, ahora Lula les pide colaboracià³n. Forma el Comità© de Amigos de Venezuela ¿Con quià©n? Con Aznar, Bush, Fox, Lagos, entonces -me contà³ el ministro de Relaciones Exteriores, Amorà­n- Venezuela le pidià³: `Por favor, ¿podemos poner algunos amigos de Venezuela en el Comità© de Amigos?`. `¡No! …—contestà³…—, no podemos cambiar, eso es lo que hay`, entonces, Fidel dijo, con todo su sentido del humor: `Con amigos como esos no necesitas enemigos` y Chávez rematà³: `Prefiero tratar los asuntos nosotros mismos`.

MH: ¿Quà© opinan los sindicatos, el Movimiento de los Sin Tierra?

…—JP: Hace tres dà­as, Joao Pedro Stedile, secretario de los Sin Tierra, me mandà³ un artà­culo del domingo pasado donde un gran diario de Brasil titula: "Lula y los hacendados en clima de paz". Allà­, relata una gran fiesta organizada por los más grandes hacendados donde estuvo Lula como invitado, para celebrar, para sacarse fotos con los hacendados ¿Por quà©? Porque su principal proyecto en la agricultura es estimular a los agroexportadores, introducir los transgà©nicos y extender la produccià³n de soja y otros productos para la exportacià³n. La reforma agraria tiene que ser en lugares alejados de las tierras fà©rtiles cultivables. El MST se siente defraudado porque lo apoyaron puerta a puerta, lucharon, ahora están con mucha frustracià³n y fijaron fecha para dentro de 3, 4 meses lanzar, otra vez, la única forma en que saben hacer la reforma agraria con gobiernos que toman estos virajes: las ocupaciones de tierras.

En el artà­culo que te comentaba Lula dice, refirià©ndose a los hacendados: "Antes yo hablaba mal de vosotros. Ahora creo que todos nos entendemos mejor", mientras hay 60.000 acampados viviendo bajo carpas de plástico, sin comida y esperando que Lula lance algún tipo de reforma agraria.

Los empleados públicos están preparando una huelga general -no sà© si van a lanzarla para este mes-, los metalúrgicos de Forza Social -que es una central sindical supuestamente más amarilla que la CUT- ya anunciaron que preparan una huelga contra la polà­tica salarial. El salario mà­nimo de Lula de U$S 69 es exactamente igual al de Cardoso, o incluso puede ser un poco menos.

Todos estos sectores empiezan a moverse, no a grandes saltos pero, lentamente, el descontento está generándose, independientemente de lo que dicen las encuestas de un 60/70% de aprobacià³n.

En Amà©rica latina creo que algunos sectores están empezando a darse cuenta que no es un gobierno de izquierda, pero se quedan con la ilusià³n que si fue votado por 52.000.000 de personas es popular, olvidando que Menem tambià©n consiguià³ una gran mayorà­a mientras estaba destruyendo el paà­s.

MH: Me pregunto si no es una visià³n exageradamente negativa.

…—JP: A veces la gente dice: `Petras, usted es negativo, no cincide con lo que dice la radio, eres terrible, nadie te satisface`, y yo contesto: `Sà­, algunos me satisfacen: los cocaleros, los Sin Tierra`. Fà­jate que yo no estoy diciendo que todas las medidas tienen que salir de asambleas populares, sino de representantes que està©n vinculados con el pueblo y sus organizaciones. Como hace Evo Morales en Bolivia. Estuve con à©l en Chapare, en diciembre del año pasado cuando estaban discutiendo el plan de lucha, haciendo una consulta en una gran asamblea de cocaleros que escuchaban, haciendo comentarios, formulando los 10 puntos del programa para los jubilados, para los trabajadores fabriles y demás sectores populares. Discutieron, luego Evo, como un gran là­der, presentà³ los puntos para negociar y rompià³ las negociaciones cuando no vio ningún resultado. Para mà­ ese es un liderazgo que consulta, discute y despuà©s va implementando desde arriba. No hay que convocar todos los dà­as una asamblea para ver quà© hacer. Se discute un plan de lucha y luego el là­der decide la táctica, la forma de implementarlo, eso es obvio.

MH: Hay sectores al interior del PT que sostienen que hay dos planes.

…—JP: Esa es la izquierda del PT que dice: `El Plan A va a fracasar y luego Lula tendrá que girar al Plan B`. Pero Lula está anunciando el plan para los prà³ximos 4 años, no es simplemente una táctica, entonces la lucha es inevitable. Las páginas del "Wall Street Journal" y el "Financial Times" le aconsejan que se apresure a poner en práctica el programa de modificar las indemnizaciones, bajar las jubilaciones, eliminar las restricciones a las inversiones de capitales, porque "la luna de miel va a terminar dentro de un año". Ellos lo saben. La izquierda del PT vive de ilusiones ¿Por quà©? Porque siguen congelados con el cuadro de 1980, 85, 90, no están al dà­a con las transformaciones orgánicas del PT, la transformacià³n programática, la transformacià³n del partido, siguen con la ilusià³n de Lula del pasado. Hablan de Lula como el `Presidente metalúrgico`. Hace 23 años era metalúrgico.

Todas las tendencias juntas de la izquierda del PT llegaron a representar el 35/40 %, se quejaban, criticaban, pero a partir de fines de los 80 aceptaron la lucha en el interior del aparato del PT contra el centro que era Lula y la derecha con Suplici y los demás. Pero ya todos funcionaban dentro del aparato.

El Ministro de Finanzas presentà³ el plan econà³mico y lo votà³ a favor el 70%. Cuando hablan de la primera fase, de la crisis que tenemos que superar para luego hacer otra polà­tica social, como dijo el Ministro de Planificacià³n, es para reà­rse. Designaron derechistas en Finanzas, Agricultura, Industria, Comercio, los ministerios claves. El presidente del Banco Central pretende separarlo del control del Poder Legislativo y a eso lo llama autonomà­a y todos, incluso Celso Furtado, hablan de su privatizacià³n, poniendo al frente a un ex gerente del Banco de Boston que hizo la gran estafa a los ahorristas argentinos.

Sinceramente, yo no creo que haya un Plan B, lo que yo veo es el final del PT como un proyecto popular. Hay que volver a reconstruir otro proyecto, con otra estructura, tal vez aprendiendo de los primeros perà­odos del PT.

MH: ¿Te parece que un polo Argentina-Brasil, sobre todo sin Menem en el poder, abrirà­a la posibilidad de un Mercosur que objetivamente se oponga a los intereses de EE.UU. en la regià³n?

…—JP: ¡No! Para nada. Brasil está copatrocinando el ALCA con EE.UU. pretendiendo modificar algunas polà­ticas ¿Quà© medidas quiere modificar? EE.UU. es tan liberal como Brasil y Lula está completamente comprometido con la polà­tica liberal a ultranza. Lo que quiere es quitar proteccionismo a EE.UU., hacerlo simà©tricamente liberal. Es una crà­tica desde el liberalismo contra el proteccionismo norteamericano.

Creo que algunas medidas extremistas de Cavallo y compañà­a, frenando y poniendo barreras a la circulacià³n, pensando que perjudicando a Brasil ganaban el favor de Washington, no les interesan. Ahora van a bajar las barreras para que circulen mejor las mercaderà­as entre Brasil y Argentina y complementariamente con EE.UU. que no tiene problemas ni con Kirchner ni con Lula, incluso va a apoyar a Kirchner porque no va a robar ni extorsionar a las empresas norteamericanas cobrándoles un 10/15% de comisiones por los acuerdos. Tal vez Kirchner baje el precio a 5% o menos.

MH: ¿Dirà­as que el Mercosur es funcional al ALCA?

…—JP: No exactamente funcional, pero sà­ complementario. No es opuesto. Lo dicen Amorà­n, tambià©n el presidente del Banco Central de Brasil. Es su discurso, no el mà­o. Un ejemplo es que Lula rechazà³ el referà©ndum contra el ALCA diciendo: "En el PT no vamos a participar del referà©ndum contra el ALCA" y se cumplià³ con algunas excepciones como Heloà­sa Helena, una senadora valiente pero totalmente marginal del gobierno y del PT. Están preparando su expulsià³n y la de algunos otros diputados porque es un partido cada vez más personalista, más verticalista. Tarso Genro, uno de los 2 à³ 3 asesores más à­ntimos de Lula, está preparando la expulsià³n de su propia hija, Luciana. No sà© cà³mo se van a arreglar en la familia una expulsada y su expulsador. Va a ser un problema